Perseverancia y constancia a la hora de emprender

Lo primero que tienes que aprender para llegar a consolidar ese espíritu emprendedor, es cómo te van a ayudar perseverancia y tú constancia.

Para la mayoría de personas, la perseverancia y la constancia son dos palabras que significan lo mismo. Algunos incluso las asemejan a tenacidad, tesón, firmeza, persistencia, asiduidad o empeño. Aunque autores más rigurosos consideran a la constancia como parte de la perseverancia.

¿Qué es lo que cuenta a la hora de emprender?

A la hora de emprender debes cuestionarte si eres perseverante o si eres constante.

Las definiciones que nos da el diccionario de la RAE (Real Academia Española) son:

  1. a) Para la perseverancia: se puede definir la palabra “perseverar” como mantenerse constante en la prosecución de lo comenzado, en una actitud o en una opinión.
  2. b) Para la constancia: se puede definir la palabra “constancia” como la firmeza y perseverancia del ánimo en las resoluciones y en los propósitos.

Cómo la perseverancia y constancia ayudan a conseguir objetivos

La perseverancia y la constancia nos ayudan a lograr nuestros objetivos. Aunque muchos emprendedores creen que lograr una vida plena a veces no requiere esfuerzo, por lo que, si no consiguen lo que persiguen, la mayoría de las veces abandonan demasiado pronto porque sus miedos superan a su fe.

Todo emprendedor ha de saber renunciar a las satisfacciones inmediatas a cambio de otras más sustanciales a largo plazo. Alcanzar el éxito en lo personal y profesional requiere ciertos esfuerzos y no sacrificios.

Si te enfocas en tus sueños y estableces un sistema para conseguirlo y eres constante, a largo plazo seguro que recibirás la recompensa y conseguirás el éxito deseado.

La constancia es un puente entre el deseo y la realización.

Recuerda que para conseguirlo además entre otras cosas has de ser positivo, responsable, tratar bien a la gente, innovar, establecerte objetivos, además de ser disciplinado. Y siempre has de pasar a la acción, pues el más pequeño de los actos es superior que la mejor de nuestras intenciones. Alcanzar lo mejor de la vida tan solo requiere esfuerzo, concentración y empezar dando el primer paso.

Los sueños de los grandes emprendedores comenzaron modestamente

¡Todos los sueños empiezan modestamente! Y seguro que te harás la pregunta ¿cómo se consiguen los grandes logros? Y si la respuesta la quieres saber enfocada a esta nueva actividad emprendedora que quieres iniciar, debes tener en cuenta que los grandes logros en la vida, cualquier cosa que valga la pena conseguir, no se consigue con fortaleza, sino con perseverancia en el día a día.

Siempre se ha dicho que la diferencia entre las personas con éxito y las que no lo tienen no ha sido la falta de esfuerzos o conocimientos, sino la falta de voluntad y constancia. Y la constancia no está en empezar, sino en perseverar.

Perseverancia para impulsar la clave del éxito

Si te preguntas ¿cuál es la clave del éxito?, por ejemplo, para hacer crecer su negocio de TI, o porque te quieres convertir en el mejor vendedor de la compañía, o que quieres implementar un nuevo sistema o herramienta en el departamento en la empresa en la que trabajas, todas estas acciones que hagas requieren que tengas capacidad para perseverar (consistencia) y no darte por vencido. Y si se trata de tu nuevo negocio que has creado, tu iniciativa emprendedora en caso de que las cosas no salgan bien a la primera, tener perseverancia es clave.

El éxito de la noche a la mañana es un mito

Cuando inicias un negocio, pero no te mantienes firme en él por mucho tiempo, puedes malograr todos los esfuerzos e ilusiones que habías puesto en él. Debes dar tiempo suficiente para que rueden las cosas, porque estás aprendiendo como emprendedor a convertirte en un empresario. Y te aseguramos que, construir una reputación sólida, también se requiere tiempo, por ende, constancia y perseverancia.

Muchos de los «éxitos de la noche a la mañana» que observamos en los negocios son a menudo el resultado de años de perseverancia y constancia. Años de tener un plan y apegarse a él. No rendirse cuando las cosas no salen bien a la primera.

Ejemplo de consistencia en la industria de TI

En la industria de servicios administrados de TI, lamentablemente a menudo se observa que la falta de coherencia y la falta de perseverancia perjudican a las personas y las empresas en tres áreas:

– Búsqueda de nuevos clientes

El marketing es un sistema, no un evento. Debes hacer un poco cada día de manera consistente. Algunos expertos en marketing, dicen que hay que mimarlo. Los resultados vendrán. No esperes hasta que tus estantes del almacén estén vacíos, sino debes mucho antes comenzar a buscar clientes potenciales.

– Implementación de un nuevo sistema

Pasar tu negocio de TI de una simple aplicación de Helpdesk a una herramienta de Automatización de servicios profesionales (PSA), respaldada por sólidos procesos comerciales, es difícil. Es frustrante. Lleva mucho tiempo. Pero renunciar a implementar un sistema de este tipo porque es más cómodo quedarse donde está significa que, en el mejor de los casos, estás posponiendo lo que debe hacerse para garantizar tu éxito futuro o, en el peor de los casos, abortando esos planes futuros por completo.

– Convertirse en un líder

Si eres un técnico que necesita dejar sus herramientas y convertirse en el jefe, te sientes como si estuvieras comenzando tu carrera desde cero. Necesitas enfocarte en hacer las cosas cómo las hacen los líderes, día tras día. La otra salida que tienes, es que podrías fingir que sigues siendo indispensable para la construcción de ese servidor nuevamente y posponer convertirte en líder mañana, el día después de mañana, o quizás lo dejas para el año que viene.

Ser bueno en las cosas haciéndolas consistentemente

En todos estos casos, no pospongas las cosas hasta que creas que eres realmente bueno en ellas. No te preocupes por la técnica por ahora. Si no eres bueno en algo, hazlo de todos modos. Cada día. Sigue haciéndolo y te irá bien.

 

 

Cómo maximizar tus posibilidades en la iniciativa emprendedora

Para la gran mayoría de personas, iniciar su propio negocio es como un sueño hecho realidad. Aunque obviamente no está exento de desafíos.

A veces es conveniente detenerse en cuáles son los datos de una economía potente como la de Estados Unidos, que en plena pandemia y a pesar de las restricciones, aproximadamente 27 millones de emprendedores se habían lanzado a crear sus respectivas empresas, teniendo en cuenta que en este país el 30% de las pequeñas empresas fracasan en su primer año, de ahí que encontrar formas de tener éxito puede parecer un gran desafío.

Por lo que cabe la pregunta: si quieres ser un emprendedor, ¿qué puedes hacer para aumentar tus posibilidades de éxito? Si sigues las pautas que aquí te damos, desde el arranque en que fijes la fecha que creas será el momento en que estés preparado, contarás con alguna ventaja sobre tu competencia.

1º) Debes elegir un sector de actividad económica que te gusta

La forma más fácil de tener éxito en tu negocio es asegurarte de disfrutar lo que estás haciendo. Por ello, durante el proceso de planificación debes hacer una reflexión sobre tus habilidades, en el sentido de cómo las puedes usar para que, haciendo un uso adecuado de ellas, puedas llenar un vacío en el mercado.

Pero en el caso de que tus habilidades no se ajusten a algo que te apasiona, debes comenzar a pensar en otras industrias que también crees que puedes encajar bien ellas, de manera que consideres cómo podrás usar tus habilidades en esta otra industria.

Como emprendedor, pasarás muchas horas trabajando en tu negocio. Asegúrate de disfrutarlo antes de comprometerte con un plan de negocios. Si no lo haces, superar los obstáculos que enfrentan cada pequeña empresa puede ser casi imposible. Por lo que necesitarás tener ese fuego y gestionar con rigor para superar los obstáculos.

2º) Debes dirigirte a esos clientes que tus competidores dejan atrás

Una vez que tengas un nicho, comienza a investigar tu mercado objetivo. ¿Qué buscan los consumidores en determinados productos y/o servicios? ¿Cómo ayudarás a satisfacer sus necesidades? Esto requiere observar detenidamente los movimientos de tus competidores en la industria y debes determinar con la mayor precisión posible, qué necesidades aún no se están satisfaciendo.

Cuando comprendas cómo tu negocio puede satisfacer la demanda de los clientes de una manera que sus competidores no lo hacen, automáticamente te estás preparando para el éxito.

3º) Perseguir exactamente el mismo mercado objetivo que tus competidores solo hace que sea más difícil para tener éxito

Recuerda que si es el mismo mercado objetivo el que persigues tú y tus competidores, es evidente que solo hace que sea más difícil tener éxito. Pero perseguir a los clientes que están dejando fuera, porque tu competencia ya ha crecido demasiado y no tiene tiempo para atenderlos, por ejemplo, a pequeños clientes, ir a su pesca siempre es una buena idea. No falla: hay clientes disconformes en todos los sectores de actividad, aunque correspondan a una base de clientela de grandes organizaciones o pymes con los cuales dichos clientes vienen trabajando hace años.

4º) Debes establecer un presupuesto y aferrarte a él

La planificación financiera es una de las mejores maneras de prepararse para el éxito como propietario de un negocio. Pero requiere trabajo.

Antes de comenzar a construir la que va a ser tu marca, debes contar con una buena fuente de capital. Esto significa encontrar inversores, trabajar con un socio comercial o utilizar tus ahorros para mantener las cosas en funcionamiento.

Considera cuánto dinero necesitas para alcanzar tus metas en el primer año y elabora un plan para lograrlo. ¡Escríbelo y apégate a él!

Si necesitas un préstamo, debes comenzar a buscar quiénes serán tus financiadores, caso de un Banco u otro tipo de entidad financiera. Puede ocurrir también, que tú seas dueño de la idea y otra persona ponga el capital para implementar este nuevo negocio. Si planeas sacar dinero de tus ahorros, asegúrate de dejar suficiente resto para cubrir tanto los imprevistos que siempre ocurren en los negocios, especialmente en las etapas preliminares, así como para tus gastos personales.

A medida que tu negocio vaya creciendo y cambiando, es posible que debas adaptar tu presupuesto y actualizar tu plan de negocios. Y esta es justamente una señal de que estás haciendo bien las cosas. El cambio es una parte que hay que asumir como natural, es el proceso en sí.

5º) Centrarse en el crecimiento sostenible

Una de las mayores caídas para los empresarios es crecer demasiado rápido. Es fácil ver el éxito temprano y querer expandirlo, pero hacerlo demasiado rápido puede ejercer presión financiera sobre tu empresa. Si vas a crecer, empieza poco a poco.

Incorpora un nuevo socio comercial o empleado cuando los necesites en lugar de acelerar el proceso. Alquila un espacio de oficina una vez que sea práctico, no cuando consigas tu primer gran cliente.

Al crecer lentamente, te prepararás para el éxito futuro. No gravarás tu presupuesto ni forzarás tu operatoria normal ni tus procedimientos.

 

Los factores clave para el éxito en la iniciativa emprendedora

Si aún te estás preguntando si la iniciativa emprendedora es clave en la sociedad actual, la respuesta es contundente: es un engranaje vital para impulsar el motor de cualquier economía.

Gracias a su importancia económica y social, tiene sentido entonces que se cultive, motive y apoye sin paliativos a las iniciativas emprendedoras en la medida de lo posible, tanto desde las instituciones públicas como privadas. Pero, ¿cómo podemos fomentar el espíritu emprendedor?

A continuación, algunas de las claves a tener en cuenta:

1º) Desarrollar una mentalidad emprendedora

El éxito como emprendedor no solo depende de la habilidad para lidiar con los números y las finanzas. A pesar de que estas capacidades son básicas para facilitarte el camino hacia numerosas oportunidades de negocio, el desempeño como emprendedor dependerá en gran medida de tu mentalidad emprendedora.

Debes de tener siempre presente que una iniciativa emprendedora siempre se identifica con dar respuesta a retos y problemas, o sea, brindar soluciones de una manera que no se ha hecho antes. Para ello, es necesario fomentar un pensamiento independiente y una mentalidad con una perspectiva única, capaz de correr riesgos, idear soluciones innovadoras y con la fuerza suficiente para poder gestionar en una época caracterizada por la inestabilidad y la incertidumbre.

¡Pero no te desanimes! La mentalidad emprendedora se puede desarrollar con tiempo y esfuerzo.  Lo importante es que puedes disponer de una serie de prácticas que conviene poner en marcha como la reflexión diaria, que te ayudarán a tomar decisiones meditadas y con claridad. Por ello, es imprescindible que estudies, te informes, que leas todo lo que puedas para tener esos datos y novedades que te ayudarán a reforzar tu mentalidad innovadora y emprendedora. También, te va a marcar una diferencia con otros, tu capacidad de aprender de las experiencias de otros emprendedores ya experimentados que te ayudará a evitar futuros errores como emprendedor.

2º) Enfrentarse a retos y situaciones desafiantes

Es importante que puedas asistir a eventos empresariales con la finalidad de crear redes de contactos y que puedas apoyarte en mentores experimentados que te puedan guiar en tus primeros pasos como emprendedor, además de que te puedan ofrecer nuevas perspectivas sobre tu negocio, el mercado, etc.

Todas ellas también son acciones que estimularán tu mentalidad empresarial.

3º) Pensar diferente

Es importante tener curiosidad, inquietud y creatividad, ya que son la base del espíritu empresarial. Ser capaz de ver las situaciones y las necesidades del público de una forma diferente para aportar soluciones y poder dar respuesta a esas lagunas que siempre un emprendedor termina encontrando en el mercado, lo que genera disponer de un nicho, abrirse la puerta para estar llevando su idea a la acción.

Se trata de identificar una idea de negocio basada en una oportunidad detectada en el mercado. Conviene diferenciar ambos conceptos. Una idea de negocio en sí misma puede no resultar fructífera. A diario surgen cientos de ideas de negocio, pero como es lógico no se ponen en marcha tantos negocios como ideas surgen, ya que buena parte de ellas no responden a ninguna oportunidad real.

Para determinar si dicha idea está basada en una oportunidad de negocio real, el emprendedor tiene que analizar aspectos clave como el tamaño del mercado, el perfil del target al que se quiere dirigir o la competencia que existe.

4º) Tener acceso a la financiación del proyecto

La falta de financiación es uno de los principales muros que frenan las iniciativas emprendedoras. Contamos con escasos fondos de capital riesgo en España. No obstante, los emprendedores pueden recurrir a otras vías como los Business Angels, las aceleradoras de startups o las incubadoras.

Asimismo, desde las entidades estatales y autonómicas se convocan subvenciones y ayudas públicas dirigidas a impulsar el emprendimiento de proyectos innovadores de forma directa o indirecta que conviene explorar.

5º) La formación y capacitación

La formación empresarial resulta vital para que una iniciativa empresarial llegue a buen puerto. De hecho, aprender los principios subyacentes para dar vida a un negocio debería ser tarea obligada de cualquier persona con iniciativa emprendedora. Es la vía más confiable para alcanzar el éxito en un ámbito en el que el fracaso es común.  Ten presente que a día de hoy 1 de cada 3 negocios no llegan al tercer año de vida.

A través de la formación no sólo se adquieren habilidades y conocimientos para generar ideas de negocio o desarrollar y hacer realidad empresas propias, sino que se profundizan en áreas clave para el emprendimiento como las finanzas, las ventas, el marketing o la contabilidad. Del mismo modo, en programas de formación especializada a nivel de postgrado como es el caso de un MBA se refuerzan en el perfil emprendedor aptitudes esenciales como la variedad de tipos de liderazgo directivo, la comunicación o la confianza.

En conclusión, el aprendizaje continuo debe ser una máxima de cualquier emprendedor que tenga como objetivo prepararse para el éxito.

 

 

Cómo convertir tu iniciativa emprendedora en un éxito

La actualidad se escribe siempre precedida de la palabra innovación, ya que cada vez que un emprendedor ocupa un nuevo lugar en el mercado, es porque ha descubierto o nuevos productos o también nuevas maneras de hacer negocios. Brindar determinados servicios gracias a la tecnología actual, es la meta de cualquier emprendedor y también la clave de su éxito.

Por tanto, la innovación es esencial, ya que es impulsora de diferentes técnicas efectivas de productividad. A través de la investigación y la experimentación se desarrollan nuevas ideas que se transforman en ofertas con potencial de mejorar la calidad de vida de la sociedad.

 

De esta forma, la innovación mejora la capacidad productiva de una economía, que se traduce en un aumento del bienestar material de los consumidores, en la mejora del nivel de vida y constituye la principal fuente de prosperidad económica a medio y largo plazo. Y por supuesto, que para la persona (esa nueva start-up que ha sido la responsable de ello) significa alcanzar el reconocimiento, también ir incrementando su reputación y abrazar finalmente el éxito.

Favorecer el desarrollo industrial y mejora las empresas actuales

Las nuevas ideas de negocio de los emprendedores pueden impactar de forma directa en las empresas existentes, contribuyendo a su desarrollo y expansión. Es el caso de la implementación de nuevas tecnologías en los procesos generales de la empresa, desde la producción, a la distribución o la comercialización

Del mismo modo, el espíritu emprendedor puede favorecer un uso más eficiente de los recursos con los que las empresas ya cuentan, impulsando así su crecimiento.

Una de las principales claves para emprender con éxito es tener confianza y seguridad tanto en uno mismo como en el producto/servicio que ofrecemos. Si tenemos una idea audaz que nadie haya pensado, lo mejor es concretarla y atrevernos. Para tener éxito como emprendedor hay que dejar los miedos a un lado.

Alcanzar el éxito no es fácil pero sí posible

Cada nuevo empresario que quiera tener éxito en el reino de los negocios sabe que no es una tarea fácil pero sí posible con un toque de constancia y perseverancia.

Tener una idea de negocio parece fácil, por eso la característica que define a los emprendedores y enterpreneurs reales es la acción. Todos sabemos que esa es la parte más dolorosa del proceso, pero, ¿por qué no estar dispuesto a ello si nos proponemos tener éxito?

Es recomendable hacer una tormenta de ideas con tu núcleo duro y te ayudará a esclarecer la dirección del camino que debes elegir, los recursos que tienes disponibles en este momento para emplear y cuáles serán las estrategias más convenientes a implementar.

1º) Confianza y seguridad

Una de las principales claves para emprender con éxito es tener confianza y seguridad tanto en uno mismo como en el producto/servicio que ofrecemos. Si tenemos una idea audaz que nadie haya pensado, lo mejor es concretarla y atrevernos. Para tener éxito como emprendedor lo que debes hacer es deshacerte de los miedos y centrarte solo en el proyecto.

2º) Capacidad de liderazgo

Si tienes una nueva idea o un enfoque diferente hacia algún planteamiento, es importante tener liderazgo. Eso hará que puedas poner sobre el tablero todos los elementos que tienes que tener en cuenta para hacer tus movidas en este tu nuevo juego empresarial. El planteamiento a nivel de gestión empresarial necesita de un buen líder que esté presente en todos los procesos y las ideas. Este líder debe motivar a las personas que tenga a su alrededor para que el trabajo sea lo más efectivo posible.

3º) Gustarte y amar lo que haces

Otra de las claves para ser un emprendedor de éxito es amar lo que haces. No renuncies nunca a tus ideales. Trabajando con amor, vas a tener la oportunidad de aprovechar cualquier situación positivamente. Además, siempre tendrás tiempo para mejorar lo que haga falta.

4º) Tener capacidad de resolución

Para ser un emprendedor de éxito debes tener la capacidad de superar cualquier obstáculo e ir mejorando. Tienes que desarrollar la capacidad de visualizar soluciones rápidas y sólidas que no afecten el objetivo que te hayas propuesto.

5º) Tener capacidad creativa

Un buen emprendedor debe ser creativo en todo momento. Es importante no parar de desarrollarse y querer hacer cosas nuevas siempre. El emprendedor siempre debe estar en constante creación, sobre todo para promocionar y gestionar sus servicios y productos. De esta manera te convertirás en una persona que resalte de las demás porque siempre va más allá, no teniendo límites para poder crear nuevas ideas y solucionar cualquier tipo de obstáculo.

6º) Saber definir correctamente el nicho de mercado

Una de las cosas básicas a la hora de emprender es definir un nicho de mercado. De esta manera podrás comunicar tus mensajes y generar nuevas demandas que se desarrollarán en torno a esta comunidad interesada.

Es indispensable definir el perfil de tu público objetivo y esto se consigue haciendo un análisis exhaustivo sobre las fortalezas y recursos que brindan los servicios. Es importante crear una nueva necesidad y que los clientes se sientan que deben obtener eso que tu negocio está ofreciendo.

7º) Invertir en formación y tener una actualización permanente

Invertir no solo se refiere a inversión de capital, sino también a la inversión en las mejoras de tus instalaciones y en la formación de tus empleados.

Un emprendedor nunca debe dejar a un lado los estudios. Debe investigar y obtener nuevos conocimientos para poder plantear mejoras que puedan diferenciarle de la competencia.

 

 

Los desafíos de la iniciativa emprendedora

Lo que está fuera de toda duda a nivel macroeconómico y macro social, es que la iniciativa emprendedora es esencial para cualquier economía, sea regional o nacional. Por ello, cuando surgen críticos que se preguntas si es necesario el apoyo (a veces exagerado según algunos) que se brindan a los emprendedores, la respuesta sigue siendo que sí y de manera rotunda.

Sin duda, la iniciativa emprendedora es esencial para la economía y el desarrollo de cualquier país en pleno siglo XXI. Los emprendedores actúan como motor de desarrollo estimulando el crecimiento económico y la creación de empleo.

Más allá de generar riqueza, el papel de los emprendedores contribuye a satisfacer cada vez mejor las necesidades del mercado y las sociedades actuales. Por tanto, el espíritu emprendedor contribuye al bienestar de la sociedad.

Veamos en detalle la importancia de la iniciativa emprendedora

1º) Estimula el crecimiento económico y el cambio social

Los emprendedores son agentes dinamizadores en la economía de una sociedad. Al dar vida a tecnologías, productos, servicios innovadores, incentivan la creación de puestos de trabajo y estimulan nuevas oportunidades de negocio que, en última instancia, generan riqueza y aceleran el desarrollo económico.

Del mismo modo, los bienes y servicios innovadores que ofrecen los empresarios reducen la dependencia de procesos y tecnologías obsoletas, favoreciendo el cambio social. Es el caso de empresas como Netflix que ha cambiado por completo el mercado del entretenimiento o Udemy que ha transformado el entorno de aprendizaje llevándolo del aula a casa.

Así, el crecimiento del empleo total de un país, la transformación social y, en última instancia, la mejora del nivel de vida, dependen en gran medida de la existencia de espíritu emprendedor.

2º) Beneficios que logran los emprendedores de nuevos negocios

Sin duda la iniciativa emprendedora tiene ventajas para la sociedad de manera indirecta y para el emprendedor es una clara ventaja directa. He aquí algunas de ellas:

– Lograr una estabilidad laboral, ya que desde el momento en que creas tu empresa también has creado tu propio empleo, o sea que eres el generador de tus oportunidades.

– Lograr una autonomía que no tenías trabajando por cuenta ajena.

– Sientes satisfacción al ver que has sido capaz de poner en marcha un negocio.

– Sientes alegría, pero también responsabilidad por luchar por algo propio.

– Entras en una etapa de tu vida en la que mejorarás tus ingresos.

– Vas a tener un mayor prestigio social.

– La satisfacción de trabajar en lo que te gusta.

3º) Para convertirte en un emprendedor debes conocer hasta dónde te pueden llevar tus ideas

Siempre debes tomar la iniciativa, orientando bien tu camino elegido y seguirlo hasta llegar a tu objetivo. Y cuando decides dar el paso, te impulsan una gran variedad de razones:

– Trabajar en proyectos propios te hacen poner toda tu energía para hacerlos de manera correcta.

– Gracias al emprendimiento, cobran vida las mejores ideas, así es como puedes comenzar, sin la pretensión de cambiar el mundo, aunque con la meta de ser alguien en el mercado.

Los desafíos que te presentan la estabilidad laboral y el grado de autonomía para tomar decisiones

En el momento en que creas tu propio empleo, las oportunidades las generas tú mismo. La continuidad laboral depende de factores de negocio, pero ya no dependes de las decisiones de tu empleador. Te has convertido en jefe de ti mismo y es de ti que depende que tu empresa dé lo mejor de sí ante el mundo exterior, y con el éxito viene la estabilidad, la tranquilidad y el progreso para ti y para todo tu equipo de trabajo.

En cuanto a ese grado de autonomía que has logrado al ser tu propio jefe, la actividad se rige al ritmo que tú mismo impones, con las reglas que tú estableces y en el tiempo que tú decides. Se puede decir que la autonomía es uno de los grandes poderes del emprendedor.

Es indiscutible que necesitas aplicar gran dedicación y entrega a tu trabajo para poder lograr los mejores resultados, pero al administrar tu propio tiempo con responsabilidad puedes explorar una manera óptima de balancear tu vida familiar y laboral, y así lograr el éxito en ambas.

La iniciativa privada y luchar por algo propio

Triunfar es increíble, pero si el camino es difícil y lleno de contratiempos, mejor aún, ya que la satisfacción se multiplica al ganar una carrera que te exigió mayor esfuerzo del que pensabas.

Al momento de preguntar por la historia de gran éxito, los grandes emprendedores siempre hablan del camino recorrido y las dificultades a las que se han tenido que enfrentar, por supuesto, también a los retos. Pero una vez superados, lo mucho que disfrutaron vencer cada una de ellas.

La vida de un emprendedor es un camino lleno de obstáculos, que requiere librar muchas batallas diarias, pero poco a poco se va orientado todo en línea para conseguir un objetivo, lo que visto de esta manera no debe desanimarte. Por contario, debe motivarte para poner en lo más alto del podio ese espíritu emprendedor que es propio de la naturaleza humana.

Ganar todas estas batallas diarias para conseguir un objetivo claro te trae conocimiento y experiencia invalorables que puedes aplicar en el futuro para ser cada vez mejor, y para transmitirlo a las siguientes generaciones.

 

Cómo desarrollar tu iniciativa emprendedora

Qué es la iniciativa emprendedora y cómo fomentarla

Una de los aspectos que más cuidan los gobiernos, especialmente en un país como España, los autonómicos, es fomentar y desarrollar la iniciativa emprendedora. Por ello, lo primero que tenemos que aprender (cualquier persona que tenga el deseo y la ilusión de poner en marcha un negocio) es conocer qué es la iniciativa emprendedora y cómo se fomenta (de parte de instituciones públicas, privadas, gobiernos nacionales y regionales, etc.).

En el caso español, emprender un proyecto propio es una de las salidas laborales por las que optan cada vez más profesionales en España. Así lo confirma la Tasa de Actividad Emprendedora que sitúa a nuestro país en el top 20 mundial con un 5,2% de acuerdo al Informe GEM 2020-2021. Hay que recordar que el proyecto de investigación Global Entrepreneurship Monitor es una evaluación anual del nivel nacional de actividad empresarial en múltiples y diversos países. Actualmente el estudio cuenta con la participación de 115 países y con datos longitudinales que se remontan a más de 20 años.

También es importante conocer las razones para emprender que son muy variadas

Sin duda, las situaciones de crisis, tal como se ha vivido a escala global con la pandemia, son las que aceleran por razones de necesidad, la iniciativa emprendedora. Porque basta ver lo que ha sucedido en nuestro país con el cierre de una porción importante de la tarta de actividad económica (cierre de empresas y pérdidas de puestos de trabajo) que ha impulsado a que muchos de las personas en paro no tuvieran otra opción que emprender por cuenta propia un negocio. O sea, puede darse esta situación, o también desde personas que buscan impulsar sus ingresos hasta aquellas que lo hacen para perseguir una pasión propia, aprender nuevas habilidades, tener flexibilidad horaria o poder trabajar de forma remota, entre otros motivos. Lo que sí comparten todas estas personas que se deciden a dar vida a su propio negocio es la iniciativa emprendedora.

¿Qué es exactamente la iniciativa emprendedora?

Para desarrollar tu iniciativa emprendedora, lo que tienes que demostrar tener es la capacidad de transformar ideas en acciones. Si lo extrapolamos al ámbito de la creación de empresas, la iniciativa emprendedora se manifiesta en la actitud, la motivación y la capacidad de un individuo para identificar una oportunidad de negocio y producir un nuevo valor en el mercado.

Tener iniciativa emprendedora va asociado a la habilidad de planificar y gestionar un proyecto de creación de empresa para alcanzar los objetivos propuestos, además de ser una persona innovadora, creativa, motivada, orientada a la acción y valiente, con capacidad para arriesgar y agotar todos los recursos hasta hacer realidad el anhelado sueño de una idea de negocio.

Porque si bien tener iniciativa emprendedora también conlleva ciertos riesgos, estos quedarán compensados porque puede ser muy gratificante si se alcanza el éxito, ya que es clave para generar riqueza económica, crecimiento e innovación.

La búsqueda de mejores ingresos

Naturalmente tu empresa debe despegar antes de volar, pero al realizar un proyecto bien planeado y ejecutado las ganancias comienzan a llegar.  Un emprendedor que busca independencia económica puede obtener eso y mucho más si el negocio es fructífero, y si añades esfuerzos para invertir esas primeras ganancias sabiamente en el crecimiento y desarrollo de tu empresa, los ingresos se multiplicarán para todo tu proyecto, asegurando así un mejor futuro.

Poder lograr un prestigio social

Probablemente buscar reconocimiento empresarial está entre tus últimos objetivos, sin embargo, un emprendedor exitoso que logra sacar adelante un proyecto trascendente para su entorno, siempre va a ser acreedor a cierto nivel de prestigio social. Esto trae ventajas implícitas que facilitan tu crecimiento, ya que el prestigio abre puertas, atrae propuestas y, bien llevado, también hace más agradable el trabajo.

Trabajar en lo que quieres

Es fácil de comprender si lo analizas. Hoy en día quienes obtienen mayor éxito son los mejores en su sector de actividad, los innovadores que buscan sobresalir y conquistar a la competencia, arrasando con todo, instaurando nuevas reglas y elevando los estándares de calidad.

Al ser un emprendedor, puedes elegir cualquier sueño que quieres realizar, si trabajas en lo que más te gusta, si amas tu trabajo, serás mejor haciéndolo. Tu motivación se convierte en un factor clave, te da energía para poder cumplir cada uno de tus objetivos.

Estas son sólo algunas de las ventajas de ser un emprendedor. Pon a trabajar tus ideas y descubre hasta dónde puedes llegar. Ese es tu desafío.

 

 

Cómo crear una cultura emprendedora en tu organización

cultura emprendedora,

Una cultura emprendedora se refiere a un ambiente laboral que fomenta la innovación, la creatividad y la colaboración. Esta cultura es esencial para el éxito de una empresa, ya que permite a los empleados sentirse valorados y motivados, lo que a su vez conduce a un mejor rendimiento. Sin embargo, crear una cultura emprendedora no es algo que se logre de la noche a la mañana. Es un proceso que requiere tiempo, esfuerzo y compromiso.

Aquí hay algunos pasos para ayudarte a crear una cultura emprendedora en tu organización:

  1. Fomente la innovación y la creatividad
    Para crear una cultura emprendedora, es esencial que permitas a tus empleados ser creativos e innovadores. Esto significa que debes darles la libertad de pensar fuera de la caja, de hacer sugerencias y de explorar nuevas ideas. También debes ofrecerles los recursos necesarios para que puedan experimentar y llevar a cabo sus ideas.
  2. Promueva la colaboración
    La colaboración es clave para el éxito de una cultura emprendedora. Debes fomentar un ambiente en el que los empleados se sientan cómodos compartiendo sus ideas y trabajando juntos para resolver problemas. Esto puede incluir la creación de equipos cross-funcionales y la promoción de la comunicación abierta y el trabajo en equipo.
  3. Ofrece oportunidades de crecimiento y desarrollo
    Es importante que ofrezcas a tus empleados oportunidades de crecimiento y desarrollo profesional. Esto puede incluir la formación y el aprendizaje, así como la promoción interna y la oportunidad de tomar nuevos desafíos. Al ofrecer estas oportunidades, estás motivando a tus empleados a ser más emprendedores y a contribuir más a la empresa.
  4. Fomente una cultura de riesgo
    Una cultura emprendedora requiere que los empleados estén dispuestos a tomar riesgos. Debes fomentar un ambiente en el que los errores sean vistos como oportunidades para aprender y mejorar, en lugar de ser castigados. Esto animará a tus empleados a ser más audaces y a tomar decisiones arriesgadas que puedan llevar a grandes logros.
  5. Reconoce y recompensa el éxito
    Es importante reconocer y premiar el éxito

El emprendimiento es una actitud que se puede cultivar en cualquier organización, ya sea grande o pequeña. La cultura emprendedora se refiere a una mentalidad innovadora y proactiva en la que los empleados se sienten motivados a buscar soluciones y aprovechar oportunidades. Esta cultura puede ser clave para el éxito de una organización y para mantener su competitividad en un mercado cada vez más exigente.

Pero, ¿cómo se puede crear una cultura emprendedora en una organización? Aquí hay algunos consejos que pueden ayudar:

  1. Fomente la innovación: Una cultura emprendedora requiere un ambiente en el que la innovación sea valorada y respaldada. Los líderes deben estar dispuestos a considerar nuevas ideas y soluciones, y deben proporcionar los recursos y el apoyo necesarios para que los empleados las puedan llevar a cabo.
  2. Promueva la colaboración: La colaboración es clave para fomentar la cultura emprendedora. Al trabajar juntos, los empleados pueden compartir sus ideas y soluciones, y aprender unos de otros. Además, al trabajar juntos, los empleados pueden sentirse más motivados y comprometidos con el éxito de la organización.
  3. Establezca una visión clara: Una visión clara y compartida es esencial para motivar a los empleados y para que se sientan comprometidos con el éxito de la organización. Los líderes deben establecer una visión clara y comunicar de manera efectiva a todos los empleados.
  4. Fomente la formación: La formación es clave para mantener a los empleados motivados y actualizados. Al proporcionar formación en áreas como la innovación y el emprendimiento, los empleados pueden adquirir nuevos conocimientos y habilidades que les permitan ser más innovadores y proactivos en el futuro.
  5. Fomente la diversidad: La diversidad puede ser una fuente de riqueza y de innovación en una organización. Al fomentar la diversidad en términos de género, cultura, edad, etc., los empleados pueden aportar perspectivas y soluciones diferentes que pueden ser de gran valor para la organización.

En definitiva fomentar la iniciativa emprendedora pasa por generar una cultura de emprendimiento tanto entre los jóvenes como en su entorno familiar, para que desde este no se mate, sino que se apoye las iniciativas emprendedoras.

 

Emprender en Madrid

Veamos algunas ventajas de emprender en Madrid.

Madrid es una ciudad vibrante y cosmopolita que ofrece una amplia variedad de oportunidades para aquellos que desean emprender. La capital española es un hub de negocios y un centro financiero importante, lo que la convierte en un lugar ideal para emprendedores ambiciosos.

Además, Madrid cuenta con una amplia comunidad empresarial y un ecosistema de apoyo para emprendedores. Hay numerosas organizaciones y programas que brindan recursos, asesoramiento y financiamiento a emprendedores. También existen numerosas incubadoras y aceleradoras de negocios que ofrecen espacio de trabajo y apoyo a los emprendedores.

Otro factor importante a tener en cuenta al emprender en Madrid es la accesibilidad a una fuerza laboral altamente cualificada. La ciudad es un centro de educación superior y cuenta con una amplia población de graduados universitarios en campos como la tecnología, la ingeniería y los negocios.

Además, Madrid es una ciudad con una cultura empresarial fuerte, lo que significa que hay una gran cantidad de oportunidades de networking y de establecer conexiones empresariales valiosas. La ciudad también es conocida por su estilo de vida vibrante y su cultura, lo que la convierte en un lugar atractivo para los emprendedores que buscan una ciudad cosmopolita con una vida social activa.

En resumen, Madrid es un lugar ideal para emprender debido a su ecosistema empresarial sólido, su accesibilidad a una fuerza laboral altamente cualificada, su cultura empresarial vibrante y su estilo de vida atractivo. Con una combinación única de recursos, apoyo y oportunidades, Madrid es un lugar ideal para aquellos que buscan convertir sus ideas en realidad.

Madrid es una de las ciudades más emprendedoras de Europa. Con su vibrante escena empresarial, amplia gama de oportunidades y su posición estratégica en el corazón de España, la capital es un lugar ideal para emprender.

El mercado español está en constante crecimiento y ofrece una gran variedad de oportunidades para empresas de diferentes tamaños y sectores. Desde pequeñas empresas locales hasta grandes multinacionales, Madrid es un centro clave para el desarrollo económico y empresarial en Europa.

Además, la ciudad cuenta con una gran cantidad de recursos y programas para apoyar a los emprendedores. Desde incubadoras y aceleradoras hasta co-working spaces y asesoramiento en financiación, los emprendedores pueden encontrar el apoyo que necesitan para hacer crecer sus negocios.

Otro factor a tener en cuenta es el acceso a talento. Madrid es una de las ciudades más grandes de España y cuenta con una población altamente educada y talentosa. Esto significa que es fácil encontrar trabajadores altamente capacitados y especializados en diversos campos.

Por último, la vida cultural y social de Madrid es vibrante y diversa, lo que la convierte en un lugar atractivo para vivir y trabajar. La ciudad cuenta con una amplia gama de opciones de entretenimiento, desde teatros y galerías de arte hasta bares y restaurantes.

En resumen, Madrid es una ciudad vibrante y emprendedora que ofrece una amplia variedad de oportunidades para los empresarios. Con su vibrante escena empresarial, acceso a talento y recursos, y vida social y cultural atractiva, Madrid es un lugar ideal para emprender y hacer crecer un negocio.

Hay muchas ventajas de emprender en poblaciones de menos de 30.000 habitantes, aquí van algunas:

  1. Costo de vida más bajo: En general, las pequeñas ciudades tienen un costo de vida más bajo que las grandes ciudades, lo que significa que los costos de inicio y operación de un negocio pueden ser más bajos.
  2. Comunidad más unida: Las pequeñas ciudades tienden a tener una comunidad más unida, lo que significa que los empresarios locales pueden contar con una red de apoyo más sólida.
  3. Acceso a recursos locales: Las pequeñas ciudades a menudo tienen recursos locales, como incubadoras y aceleradoras, que están diseñados específicamente para ayudar a los emprendedores locales.
  4. Menos competencia: En comparación con las grandes ciudades, las pequeñas ciudades tienden a tener menos competencia, lo que significa que es más fácil para los nuevos negocios destacarse.
  5. Mayor flexibilidad: Las pequeñas ciudades tienden a ser más flexibles que las grandes ciudades, lo que significa que los empresarios locales pueden ser más innovadores y experimentar con nuevas ideas y conceptos.
  6. Acceso a mano de obra local: Las pequeñas ciudades tienden a tener una población más pequeña y más accesible, lo que significa que los empresarios locales pueden encontrar más fácilmente trabajadores locales.
  7. Mejor calidad de vida: Las pequeñas ciudades a menudo ofrecen una mejor calidad de vida que las grandes ciudades, con un ritmo de vida más relajado y una comunidad más cercana.

En resumen, las pequeñas ciudades ofrecen un entorno empresarial más favorable para los emprendedores, con costos de vida y de negocios más bajos, una comunidad más unida y acceso a recursos y mano de obra locales.