Lo que está fuera de toda duda a nivel macroeconómico y macro social, es que la iniciativa emprendedora es esencial para cualquier economía, sea regional o nacional. Por ello, cuando surgen críticos que se preguntas si es necesario el apoyo (a veces exagerado según algunos) que se brindan a los emprendedores, la respuesta sigue siendo que sí y de manera rotunda.
Sin duda, la iniciativa emprendedora es esencial para la economía y el desarrollo de cualquier país en pleno siglo XXI. Los emprendedores actúan como motor de desarrollo estimulando el crecimiento económico y la creación de empleo.
Más allá de generar riqueza, el papel de los emprendedores contribuye a satisfacer cada vez mejor las necesidades del mercado y las sociedades actuales. Por tanto, el espíritu emprendedor contribuye al bienestar de la sociedad.
Veamos en detalle la importancia de la iniciativa emprendedora
1º) Estimula el crecimiento económico y el cambio social
Los emprendedores son agentes dinamizadores en la economía de una sociedad. Al dar vida a tecnologías, productos, servicios innovadores, incentivan la creación de puestos de trabajo y estimulan nuevas oportunidades de negocio que, en última instancia, generan riqueza y aceleran el desarrollo económico.
Del mismo modo, los bienes y servicios innovadores que ofrecen los empresarios reducen la dependencia de procesos y tecnologías obsoletas, favoreciendo el cambio social. Es el caso de empresas como Netflix que ha cambiado por completo el mercado del entretenimiento o Udemy que ha transformado el entorno de aprendizaje llevándolo del aula a casa.
Así, el crecimiento del empleo total de un país, la transformación social y, en última instancia, la mejora del nivel de vida, dependen en gran medida de la existencia de espíritu emprendedor.
2º) Beneficios que logran los emprendedores de nuevos negocios
Sin duda la iniciativa emprendedora tiene ventajas para la sociedad de manera indirecta y para el emprendedor es una clara ventaja directa. He aquí algunas de ellas:
– Lograr una estabilidad laboral, ya que desde el momento en que creas tu empresa también has creado tu propio empleo, o sea que eres el generador de tus oportunidades.
– Lograr una autonomía que no tenías trabajando por cuenta ajena.
– Sientes satisfacción al ver que has sido capaz de poner en marcha un negocio.
– Sientes alegría, pero también responsabilidad por luchar por algo propio.
– Entras en una etapa de tu vida en la que mejorarás tus ingresos.
– Vas a tener un mayor prestigio social.
– La satisfacción de trabajar en lo que te gusta.
3º) Para convertirte en un emprendedor debes conocer hasta dónde te pueden llevar tus ideas
Siempre debes tomar la iniciativa, orientando bien tu camino elegido y seguirlo hasta llegar a tu objetivo. Y cuando decides dar el paso, te impulsan una gran variedad de razones:
– Trabajar en proyectos propios te hacen poner toda tu energía para hacerlos de manera correcta.
– Gracias al emprendimiento, cobran vida las mejores ideas, así es como puedes comenzar, sin la pretensión de cambiar el mundo, aunque con la meta de ser alguien en el mercado.
Los desafíos que te presentan la estabilidad laboral y el grado de autonomía para tomar decisiones
En el momento en que creas tu propio empleo, las oportunidades las generas tú mismo. La continuidad laboral depende de factores de negocio, pero ya no dependes de las decisiones de tu empleador. Te has convertido en jefe de ti mismo y es de ti que depende que tu empresa dé lo mejor de sí ante el mundo exterior, y con el éxito viene la estabilidad, la tranquilidad y el progreso para ti y para todo tu equipo de trabajo.
En cuanto a ese grado de autonomía que has logrado al ser tu propio jefe, la actividad se rige al ritmo que tú mismo impones, con las reglas que tú estableces y en el tiempo que tú decides. Se puede decir que la autonomía es uno de los grandes poderes del emprendedor.
Es indiscutible que necesitas aplicar gran dedicación y entrega a tu trabajo para poder lograr los mejores resultados, pero al administrar tu propio tiempo con responsabilidad puedes explorar una manera óptima de balancear tu vida familiar y laboral, y así lograr el éxito en ambas.
La iniciativa privada y luchar por algo propio
Triunfar es increíble, pero si el camino es difícil y lleno de contratiempos, mejor aún, ya que la satisfacción se multiplica al ganar una carrera que te exigió mayor esfuerzo del que pensabas.
Al momento de preguntar por la historia de gran éxito, los grandes emprendedores siempre hablan del camino recorrido y las dificultades a las que se han tenido que enfrentar, por supuesto, también a los retos. Pero una vez superados, lo mucho que disfrutaron vencer cada una de ellas.
La vida de un emprendedor es un camino lleno de obstáculos, que requiere librar muchas batallas diarias, pero poco a poco se va orientado todo en línea para conseguir un objetivo, lo que visto de esta manera no debe desanimarte. Por contario, debe motivarte para poner en lo más alto del podio ese espíritu emprendedor que es propio de la naturaleza humana.
Ganar todas estas batallas diarias para conseguir un objetivo claro te trae conocimiento y experiencia invalorables que puedes aplicar en el futuro para ser cada vez mejor, y para transmitirlo a las siguientes generaciones.